- Los granates levantaron cinco goles de desventaja al descanso para terminar llevándose dos puntos vitales de cara a la permanencia
Pocos, o muy pocos, hubieran apostado por una victoria del Cajasur en Pontevedra cuando al descanso el marcador señalaba ventaja gallega por cinco tantos (15-10). Pero treinta minutos después el cuadro granate celebraba dos puntos de auténtico oro tras imponerse 29-30 después de una segunda mitad prodigiosa, con trabajo, brillantez y, por supuesto, mucho sufrimiento. La victoria es completamente balsámica, ya que permite al cuadro de Escribano salir de la zona de descenso y meter en la lucha a más equipos, teniendo en cuenta además que los cajistas cuentan con un partido menos disputado.
No pudo empezar el encuentro de peor manera, porque en el minuto cinco y tras una dura acción defensiva, Antonio Fernández vio la tarjeta roja descalificante y el cuadro granate perdía a uno de sus efectivos para todo el partido. Con inercia positiva y el inspirado brazo de Poveda, los locales comenzaron a poner tierra de por medio, cogiendo tres goles de ventaja rápidamente.
El ataque granate era bastante impreciso y desordenado, por lo que Escribano intentó parar la dinámica del juego con tiempo muerto en el ecuador del primer acto con cuatro tantos de desventaja (8-4). Pero las cosas no mejoraron y Teucro siguió penalizando los errores cajistas, a pesar de una ligerísima mejoría en el ataque cordobés y a algunas buenas intervenciones de Torres en el arco.
Pero mucho más protagonista era Salazar en la meta gallega. El arquero local amargaba la vida una y otra vez a los granates, haciéndose muy grande y manteniendo a raya al rival. Con este panorama de más nubes que claros para la escuadra de Escribano, se llegó al descanso con un 15-10 favorable al Teucro.
Pero el arranque de la reanudación iba a ser muy positivo para el Cajasur. Los granates parecían otros, revitalizados y con un ataque muy resolutivo, en sólo nueve minutos el partido estaba empatado (17-17) y poco después Nano culminaba en gol un contraataque para dar dos de ventaja a los suyos, un 18-20 impensable poco antes.
Las nubes dieron paso poco a poco a un panorama soleado, y los goles caían como soles en la meta pontevedresa, con un Cajasur enchufadísimo e hipermotivado, que ahogaba con su 5-1 defensivo y las intervenciones de Torres todos los intentos ofensivos locales, mientras que en el otro lado Aitor y Nazario martilleaban la meta gallega.
No se lo creía nadie de la parroquia local, pero a seis minutos para la conclusión el Cajasur gozaba de su mayor renta (22-27) y el partido parecía virtualmente decidido, más si cabe viendo la dinámica de uno y otro equipo. Pero el Teucro se la jugó con una defensa individual en toda la cancha, que el Cajasur supo atacar bien al principio pero que terminó atragantándose. Nano vio la roja descalificante y el ex granate Dzokic puso el 29-30 desde los siete metros, pero no hubo tiempo para más y el cuadro de Escribano celebró sobre la pista la consecución de dos puntos importantísimos.
FICHA TÉCNICA: TEUCRO PONTEVEDRA 29-30 CAJASUR CBM
TEUCRO: Salazar, Remeseiro (2), Moyano (5), Dzokic (6), Bujalance (3), José Andrés (1), Samuel, Wermbter, Rey, Prada, Iván (4), Adrián, Poveda (5) y Corneil (3).
CAJASUR CBM: Fernando Torres (1), Nazario (9), Esteban López (5), Nano (2), Antonio Hidalgo (1), Filipe Martins (3), Aitor (7), Padilla (1), Juanlu Moyano, Carlos León (1), Jota, Domingo, Antonio Fernández y José Pablo.
ÁRBITROS: Montero Suárez (Madrid) y Estellés García (Valencia). Excluyeron por el Teucro a Iván y Adrián; y por el Cajasur a Nazario, Jota y Padilla. Descalificaron con roja directa a Antonio Fernández (5’) y Nano (59’).
PARCIALES: 3-2, 6-4, 8-4, 10-5, 14-9, 15-10 (descanso); 17-14, 17-17, 21-21, 22-25, 23-27 y 29-30.
INCIDENCIAS: Encuentro correspondiente a la decimoquinta jornada de liga en DH Plata, disputado en el Pabellón de Deportes de Pontevedra ante unos 700 espectadores.