Los de Escribano buscan hacerse fuertes en casa para ir creciendo poco a poco en su idea de juego y la plasmación en resultados
La quinta jornada dentro del grupo F de Primera Nacional depara al Cajasur CBM la vuelta a Fátima para afrontar un duelo incómodo ante el Grupo Egido Quental BM Pinto. Los madrileños suelen ser uno de esos equipos correosos del grupo, y siempre supone un rival al que cuesta mucho superar, con el sello de la talentosa escuela madrileña. El duelo se celebrará el sábado a las 20:30 en la IDM Fátima, con arbitraje de la pareja extremeña formada por Juan Manuel Vinagre Vázquez y Javier Madruga Casadome.
Dos victorias como local y dos derrotas como visitante. Esa es la línea del Cajasur CBM en este inicio de temporada complicado, sobre todo lejos de Fátima donde el cuadro granate ha tenido que afrontar dos pruebas de nivel ante Alarcos y Triana. A pesar de la derrota por nueve en Sevilla, el equipo dejó muy buenas sensaciones, luchando el partido hasta la fase final del mismo. Ahora toca intentar volver a la senda de la victoria ante el Pinto, con el arma a favor que significa jugar en Fátima ante un equipo que solo ha conseguido una victoria pero que sigue siendo igual de incómodo.
Una victoria significaría poder seguir instalado en la zona medio alta de la tabla y, sobre todo, poder ganar confianza de cara a futuros compromisos. En este sentido, Jesús Escribano señaló que “tenemos otro partido en casa en el que queremos seguir con la línea ascendente de juego y mantener nuestra racha como locales ante un equipo como es Pinto que siempre nos pone las cosas muy complicadas, con una plantilla compensada contra la que no podemos tener lagunas en el juego porque seguro nos van a penalizar mucho”.