Los granates consiguieron una victoria de prestigio ante uno de los gallitos de la categoría tras un partido muy completo
El Cajasur CBM derrotó en Fátima al BM Villa de Aranda por 31-29 consiguiendo avanzar a la segunda ronda de la Copa del Rey. Los granates, que ya vencían al descanso por tres goles de renta, se deshicieron de un rival de entidad y ya esperan en la segunda ronda a un equipo de Asobal, un pequeño premio unido al plus de moral que supone vencer a uno de los mejores equipos de la DH Plata.
Muy buena primera parte del Cajasur CBM, que salió a la pista sin complejos y decidido a tomar la iniciativa. Con un ataque fluido y muchas piernas en defensa, los de Escribano superaban al cuadro burgalés, que apelaba a la gran calidad individual de sus jugadores para mantenerse en el duelo.
El partido marchaba relativamente igualado hasta que las paradas de Ricardo Amérigo y buenas acciones ofensivas cajistas, concretadas sobre todo por la zona derecha del ataque con Esteban y Antonio Hidalgo, permitieron al cuadro local tomar una renta de tres tantos con la que dominaron el primer acto. Al técnico visitante Alberto Suárez no le gustaba nada lo que veía sobre la pista, solicitando incluso dos tiempos muertos en la primera mitad porque su equipo no estaba cómodo, pero lo único que consiguió fue evitar que sus jugadores no se fueran a vestuarios con una hemorragia mayor del 14-11 adverso. Lo mejor del Cajasur estaba por llegar.
Como un auténtico obús arrancaron la segunda parte los cajistas, imprimiendo una velocidad endiablada a sus acciones y penalizando los errores arandinos. Casi en un abrir y cerrar de ojos, Alberto Suárez se vio obligado a agotar sus tiempos muertos, porque los granates vencían 19-13 tras cinco minutos de reanudación. Aranda trataba de cortar los mejores minutos de juego local, pero el Cajasur parecía desatado, especialmente un estelar Carlos León que dio un recital anotando de todas las maneras.
El tiempo avanzaba y la renta granate se estabilizaba en cuatro-cinco tantos a pesar de los intentos burgaleses por recortar distancias. Se veía un Cajasur muy cómodo sobre la pista, pero una serie de imprecisiones volvieron a meter al Villa de Aranda en el partido con un 23-20 a falta de quince minutos. Los granates se atascaban en ataque por momentos, pero sabían gestionar su crisis para no ver su renta disminuida.
Aranda subió la intensidad defensiva y el duelo se volvió loco por momentos, con mucha velocidad e imprecisiones en ambos ataques. Los burgaleses corrían porque venían desde abajo, pero el Cajasur conseguía mantener a raya a su rival y el intercambio de goles le beneficiaba. A falta de seis minutos el 27-23 para los locales hacía presagiar un final de partido algo desahogado, pero Aranda quería morir con las botas puestas.
Un tanto de Aitor y un robo de balón posterior granate hicieron entrar a los locales en los últimos cinco minutos con seis de renta. Aranda abrió su defensa para buscar una mayor presión sobre el ataque granate, pero la victoria estaba en el zurrón cajista y lo único que consiguió fue aminorar su desventaja hasta el 31-29 definitivo. Victoria de prestigio para un Cajasur CBM que estará en segunda ronda de la Copa del Rey.
FICHA TÉCNICA: CAJASUR CBM 31–29 BM VILLA DE ARANDA
CAJASUR CBM: Ricardo Amérigo, Aitor Gómez (2), Alberto Requena (4), Esteban López (4), Nano (4), Antonio Hidalgo (3), Filipe Martins (1), Ramón Fuentes, Nazario (1), Padilla (2), Ramón Fuentes, Domingo Luis (1), Carlos León (6), Jota, Raúl Pavón (3), Antonio Fernández y Pedro Castro.
VILLA DE ARANDA: De Vega, Leonel (3), Abdel (1), Grandi (1), Nico (5), Juande (7), Megías (4), Llorens (2), Abajo, Kilian, Del Val (1), Javi García (1), Matheus (1), Elustondo y Pombo (3).
ÁRBITROS: Peris (Valencia) y Mohedano (Castilla la Mancha). Excluyeron por el Cajasur a Requena, Aitor y Jota (2); y por el Villa de Aranda a Llorens y Matheus.
PARCIALES: 1-1, 4-3, 7-5, 9-8, 12-9, 14-11 (descanso); 18-13, 21-17, 23-19, 25-21, 28-23 y 31-29.
INCIDENCIAS: Encuentro correspondiente a la primera ronda de Copa del Rey disputado en la IDM Fátima ante unos 450 espectadores.