Las pupilas de Benito Puerto jugaron un partido muy serio en una pista complicada para seguir imbatidas en lo más alto de la tabla
Sigue la fiesta para el Deza CBM, y que no pare… Las granates consiguieron su sexta victoria consecutiva en el inicio de la competición de División de Honor Plata tras superar al T-Maravilla Melilla por 17-23. La escuadra de Benito Puerto se distanció en el marcador mediada la primera parte y ya no soltó la iniciativa para terminar imponiéndose con relativa suficiencia, siempre teniendo en cuenta el espíritu luchador de un cuadro local que nunca dio su brazo a torcer.
La primera parte asistió a equilibrio en sus primeros compases hasta el ecuador de la misma. A partir de ese momento las de Benito Puerto se ajustaron mejor defensivamente para coger las primeras rentas y despegarse en el electrónico. La efectividad ofensiva de Lucía Guilabert fue vital para marcharse a vestuarios con un cómodo 8-12.
La consigna en el inicio de la segunda mitad era clara, intentar superar los primeros minutos de teórico empuje local para poder llevar el ritmo del partido. Así fue porque el Deza salió de nuevo muy concentrado, tomando pronto seis goles de renta (9-15) que supo administrar perfectamente a lo largo y ancho del periodo. Al final, las granates llegaron a los minutos definitivos con los deberes hechos y ante un rival que se vio incapaz de recortar a pesar de su espíritu de lucha. Son ya seis victorias en otros tantos encuentros para un Deza CBM que seguirá mínimo coliderando la tabla clasificatoria.