El equipo de Benito Puerto retorna a Fátima con la idea de retomar la senda de la victoria ante la peligrosa escuadra madrileña
La octava jornada del grupo D en División de Honor Plata femenina depara al Deza CBM un compromiso complicado como local ante el BM Leganés. Las jugadoras de Benito Puerto llegan al partido con mal sabor de boca tras casi no haber podido oponer resistencia en la pista del Ciudad Imperial toledano, donde cayeron con relativa claridad, por lo que buscarán resarcirse al amparo de su propia afición. El encuentro se disputará el sábado a partir de las 19:30 horas en la IDM Fátima con arbitraje de la pareja de la Comunidad Valenciana formada por David Candela Arqués y Gaspar Cabrero Montero.
Parece que le falta un punto más en todos los aspectos al Deza CBM para poder meterse en el furgón delantero de la competición. Las granates experimentan un claro crecimiento en su juego, pero tienen problemas a la hora de competir en determinados momentos, y ello les está pasando factura para dar ese salto de calidad. En Toledo se esperaba algo más de batalla, pero el equipo se vino pronto abajo dejándole un partido muy plácido al rival. Ahora la consigna es poder enmendar la plana en casa, ante un Leganés que siempre ha ganado en Fátima, por lo que se querrá romper esa maldición.
El técnico Benito Puerto apuesta por una recuperación inmediata tras el partido en Toledo, con un partido como local que puede servir para empezar a asegurar los puntos en Fátima, punto de partida perfecto para ganar en seguridad y poder plantearse metas más ambiciosas. Puerto tiene mucho respeto ante un rival muy incómodo que “ha empezado muy bien la competición, sumando bastantes puntos, instalado en la quinta plaza y siendo el único que ha podido derrotar a Toledo, haciéndolo además en su propio feudo”. El técnico apostó por “mejorar ostensiblemente el porcentaje de acierto en el lanzamiento y evitar las pérdidas de balón, porque si no lo conseguimos será imposible sacar adelante el partido dada la calidad del rival”.