- El Cajasur sacó toda su casta cuando caía por cuatro goles de renta y terminó venciendo justamente al segundo clasificado
Otra noche mágica en Fátima. El Cajasur CBM dejó lo mejor para el final y derrotó al segundo clasificado, el BM Alcobendas, por 31-28. Los granates se marcharon al descanso con un gol de desventaja y perdían 17-21 a falta de veinte minutos, pero en ese momento supieron reaccionar apoyados en su amor propio y en una grada de Fátima que volvió a jugar un papel determinante para que los dos puntos se quedaran en casa. Una victoria que sabe a gloria bendita ante uno de los gallitos de la categoría, sobre todo por la forma de producirse.
Dos periodos muy distintos tuvo el encuentro, el primero igualado y ordenado, y el segundo anárquico y loco, con las emociones a flor de piel. De salida ambos equipos se dedicaron a estudiarse, con un ritmo de juego algo lento e intercambio de tantos. Ni Cajasur ni Alcobendas conseguían imponer su mando sobre el rival, aunque las primeras ventajas fueron madrileñas hasta que el cuadro granate se puso por primera vez por delante (8-7) en el minuto 16.
Todo siguió bastante equilibrado hasta el descanso con De la Rubia llevando la iniciativa goleadora en el bando visitante y un mayor reparto en las filas cordobesas. Todo apuntaba a empate al descanso pero un tanto de Alberto Díaz de golpe franco con el tiempo cumplido dio la ventaja mínima a los madrileños (14-15), aunque se auguraba batalla de la buena para la segunda mitad.
Y la hubo a base de bien, porque la reanudación lo tuvo todo. Alternativas en el marcador, tensión, un público entregado y grandes dosis de casta. Y eso que no empezó bien para los de Escribano, porque el Alcobendas salió más intenso y pronto abrió distancias, primero con el 16-19, obligando a Escribano a pedir tiempo. La cosa no mejoraba y entre Catalina y Gonzalo Velasco se las apañaron para dar la máxima a su equipo, con un 17-21 que encendía todas las alarmas en las filas granates.
Pero todo cambió en poco tiempo, porque el Cajasur no quiso caerse al abismo y con las acciones de Nazario, tres latigazos de Domingo, una fortísima defensa y Ramón enchufadísimo, endosaron un 5-0 de parcial que volvió a ponerlo por delante, y ya no se bajaría de la ola buena.
El Alcobendas lo intentó con acciones rápidas en ataque y abriendo su defensa, pero los granates estaban de dulce liderados por el puertorriqueño en ataque, por Ramón atrás y por un público completamente entregado en la grada. Además en los últimos compases apareció la veteranía de los Hidalgo, Padilla, Requena o Filipe para asegurar que esta vez no volaran dos puntos de auténtico oro mientras Fátima degustaba poco a poco el dulce sabor de la victoria.
FICHA TÉCNICA: CAJASUR CBM 31–28 BM ALCOBENDAS
CAJASUR CBM: Ricardo Amérigo, Aitor Gómez (4), Alberto Requena (3), Esteban López, Nano (3), Antonio Hidalgo (2), Filipe Martins (6), Ramón Fuentes, Nazario (6), Padilla (1), Carlos León (3), Jota, Domingo (3), Raúl Pavón y Juanan Romero.
GUADALAJARA: Eceolaza, Alberto Díaz (4), Manu Catalina (6), De la Rubia (5), Velasco (5), López Boyarizo (2), Nevado, Ortega, Torres, Rodríguez, Gutiérrez, Crespo (2), Gimeno (3), Mikel y Martín (1).
ÁRBITROS: García Vico y Sanmartín Almazán (Andalucía). Excluyeron por el Cajasur a Aitor Gómez, Domingo, Raúl Pavón y Jota (2); y por el Alcobendas a Alberto Díaz, Martín, Mikel y Rodríguez.
PARCIALES: 2-3, 3-4, 6-7, 10-9, 12-11, 14-15 (descanso); 16-18, 17-19, 19-21, 23-22, 27-24 y 31-28.
INCIDENCIAS: Encuentro correspondiente a la séptima jornada de liga en DH Plata disputado en la IDM Fátima ante unos 400 espectadores.
