La escuadra de Escribano, con el billete para la fase de ascenso en el bolsillo, se tomará el partido como prueba de cara a lo que viene
Relajado y con su objetivo replanteado a mediados de temporada recién cumplido, el Cajasur CBM afronta su último desplazamiento de la liga regular en el grupo F de Primera Nacional visitando la pista del Maravillas Benalmádena, equipo que va a acabar la competición igualmente con sus deberes hechos en la zona templada de la clasificación, pero que querrá despedirse de su afición consiguiendo la victoria ante el subcampeón liguero. El duelo se disputará el sábado a partir de las 19:00 en el Pabellón Benalmádena Pueblo, con arbitraje de la pareja perteneciente al colegio gallego formada por Carlos Manuel Alonso González y César Díaz García.
Trámite para los de Escribano estas dos últimas jornadas ligueras, ya con su participación en la fase de ascenso a DH Plata asegurada. La idea es que en estas dos semanas los partidos puedan tener utilidad de cara a afinar mejor si cabe la puesta a punto del equipo, que se jugará sus opciones el fin de semana del 17 al 19 de mayo.
Tanto el duelo en la pista costasoleña como el derbi contra La Salle supondrán el epílogo a una liga regular en la que los de Escribano fueron de menos a más, basando su clasificación en la gran racha victoriosa entre octubre y enero. Ambos partidos, lejos de su desinterés clasificatorio, deben servir como banco de pruebas para el futuro más cercano granate.
