La escuadra granate retorna tras la semana de descanso con un desplazamiento peculiar a una de las pistas más complicadas
Jornada de descanso la que vivió la División de Honor Plata femenina el fin de semana pasado y ahora toca la vuelta a la realidad para el Deza CBM, que debe afrontar la segunda visita consecutiva, esta vez más complicada en el aspecto logístico, a Ceuta para medirse al Estudiantes Ceuta. Las granates jugarán en una pista donde cuesta mucho sacar los puntos, pero lo harán enrabietadas tras la dura remontada sufrida en el último duelo disputado en Leganés. El choque se disputará en el Pabellón de La Libertad el sábado a partir de las 18:00, con arbitraje de la pareja andaluza formada por Carlos Vera Ávila y Alberto Vera Ávila.
Primera de las últimas cinco jornadas ligueras para el Deza CBM, seis partidos en el caso granate contando el aplazado ante el Ciudad Imperial. El objetivo para las de Benito Puerto es terminar lo más arriba posible, sabiendo que el equipo va a conseguir su mejor clasificación histórica en los tres años que lleva en la categoría. Como quiera que sea, la derrota en Leganés tras ir venciendo hasta de ocho tantos hizo algo de mella en las aspiraciones granates, que siguen centradas en poder terminar entre los cinco primeros.
No será fácil ni mucho menos puntuar en la pista norteafricana. Al margen de la posición en la tabla del rival, con nueve puntos menos y un partido más disputado que las granates, el Pabellón de la Libertad no es para nada un feudo fácil, ya que el cuadro ceutí tiene una plantilla bastante cualificada, algo que demostró en la primera vuelta en Fátima. Saber jugar bien los momentos importantes del encuentro será factor clave de cara a poder traerse un buen resultado para Córdoba.