Las granates vencieron por la mínima en una de las pistas más complicadas de la categoría tras remontar hasta seis de desventaja
Octava victoria en ocho partidos para el Deza CBM, que confirma las fenomenales sensaciones en este inicio de competición. Esta vez fue por la vía del más difícil todavía, en la pista de un favorito al ascenso como es el UCAM Murcia y remontando hasta seis tantos para terminar imponiéndose en el tramo final por 23-24, dando un puñetazo sobre la mesa en la competición.
Era un partido muy duro en tierras murcianas y el Deza CBM lo sabía. Las granates asistían al ritmo infernal que metía el cuadro local al encuentro, con circulación de balón rápida y mucha velocidad en general, pero se las apañaban para no distanciarse excesivamente. En el tramo final de la primera parte, con un UCAM muy entonado se pasó del 9-7 al 13-8 que campeaba al descanso, la máxima renta murciana en lo que iba de partido.
No empezó del todo bien el segundo acto porque el UCAM pronto se fue hasta los seis de renta (16-10), pero ahí cambió el partido radicalmente. El Deza, lejos de venirse abajo, subió mucho sus prestaciones defensivas, muy agresivo y perfecto en las ayudas, consiguiendo nivelar la contienda a doce minutos del final (17-17) y obligando a pedir tiempo al técnico local. El UCAM volvió a tomar aire y cogió tres de renta, pero salió el espíritu de lucha del cuadro de Benito Puerto, que volteó el panorama en un final de infarto para llevarse los dos puntos por la mínima.