Ocho días frenéticos sin premio tras nueve meses de gran sacrificio

27 mayo, 2024

El Cajasur Córdoba BM se quedó a las puertas del ascenso tras rozarlo con la yema de los dedos en Zarautz y caer luego ante Ibiza  

Esta es la bonita historia, con final no tan bonito, o sí, según se quiera ver, de la enésima tentativa de ascenso a División de Honor Plata protagonizada por el Cajasur CBM más humilde, más B y más contracorriente de todos los “Cajasures”, permítanme la entrañable expresión, que lo intentaron en pasadas temporadas, seis exactamente dentro de los últimos once años.

No era el objetivo luchar por el ascenso, ni siquiera acercarse a él, más si cabe con la importante renovación sufrida por la plantilla el pasado verano. Pero, tras un complicado inicio, el equipo encadenó una racha muy positiva sobre la que cimentó su clasificación para luchar por el ascenso. No fue benévolo el sorteo, ni con la sede ni con los rivales, pero los de Escribano afrontaron con mucha filosofía positiva el reto.

En Zarautz comenzamos un periplo que nos iba a llevar a disputar finalmente cinco duelos en ocho días. El viernes 17 afrontamos quizás el duelo más duro y definitorio, contra Amenabar Zarautz, organizador, intentando iniciar de la mejor manera posible. El partido estuvo de cara hasta los últimos diez minutos, pero al final nos pudo un poco el ambiente y cedimos por la mínima (40-39). Al día siguiente, ante Sant Cugat, la historia fue opuesta, marchando a remolque durante cuarenta minutos y remontando para llevarnos la victoria por 30-28. El domingo necesitábamos hacer nuestro trabajo y depender del otro resultado. La exhibición ante Granollers B fue el peak de la temporada, con un excelso 38-25, pero luego, en el Zarautz-Sant Cugat, a falta de diez segundos teníamos el ascenso en el bolsillo, pero pasó lo que pasó y Zarautz obtuvo su premio.

Lejos de venirse abajo, el grupo y el club entero se preparó para encarar la última oportunidad, una promoción de ida y vuelta contra Ibiza. Había tan sólo dos días de descanso y, obviamente, llegamos en clara desventaja física, unida a la diferencia respecto a una plantilla media de DH Plata. Se intentó todo, conseguimos un ambiente excepcional con llenazo en Fátima, pero el Ibiza supo imponer su ley y se llevó siete de renta (25-32). Las opciones de ascenso para la vuelta en las Pitiusas eran muy remotas, pero el equipo dio la cara empatando a 31 y dejando una magnífica imagen.

Hasta ahí llegó la semana loca granate, sin el premio final del ascenso pero sí con la satisfacción del que se lo dejó todo en la pista. Llegarán más opciones. GRACIAS.

Club Córdoba de Balonmano